"Mamá, eres la mejor madre"

Todas las mujeres pasamos por momentos complicados cuando nos hacemos madres.  Sobre todo, hay momentos que pensamos que lo estamos haciendo mal, que nos hemos rendido, que estamos al límite, que no tenemos fuerzas y muchos otros momentos difíciles que una vez pasados nos hacen sentir mal, porque pensamos que no somos buenas madres o somos débiles.

Nada más lejos de la realidad.  Por eso hoy va a ser tu hij@ el que te diga lo buena madre que eres, por eso quiero ponerle voz a tu bebé y que él sea el que te diga que eres la mejor madre.

"Hola mamá, llevo poco tiempo en tu vida, pero quiero que sepas que yo soy feliz, eres la mejor madre y que nadie te diga lo contrario.

Hace poco estaba dentro de tí, pero ya tocaba salir, ya tocaba empezar mi vida contigo, ya estaba preparado.

Los dos hemos pasado por un momento duro para que yo saliera, temblores, mucho dolor y cansancio.  Pero ahora que estoy aquí no me arrepiento de nada, estoy contigo y eso es mi regalo.  

En tu cara se veía el cansancio del esfuerzo, tu rostro estaba desencajado, aún así me sonreías con dulzura y tus brazos me cogían con amor desinteresado.

De pronto empecé a tener hambre y tú me pusiste en tu regazo, yo empecé a buscar tu pecho y tú me lo ofreciste sin dudarlo.

Esto de comer no es nada fácil, tu cara de dolor cuando agarro tu pezón, y cómo aprietas el puño para aguantar el pecho hinchado, pero eso no te frena, me alimentas y me hago mayor, estoy feliz, estoy saciado.

A veces veo el miedo en tu cara cuando me coges, y lo entiendo porque yo tampoco sé lo que hago, solo sé llorar cuando te necesito y realmente dependo de tí para todo a mi lado.  

Y tú realmente no dudas ni un momento, siempre estás para calmar mi llanto.  Hay algo dentro de tí que te hace madre, y por eso el miedo se convierte en cuidado.

Te he escuchado llorar desconsolada a escondidas, porque piensas que ya no te quedan fuerzas, que me has fallado, pero cuando te llamo siempre vienes aprisa, sin pensarlo, sin apenas dudarlo.

Me gritas y te enfadas conmigo, no te sientas mal, sé que cuidarme no es nada fácil, algunas veces te lo hago demasiado complicado.  Pero sé que te arrepientes, eres una persona, antes que madre eres humano.

Tendida en tu cama, te escucho pedirme que duerma, que el cuerpo tienes agotado, lo siento mamá aún no sé dormir, no eres mala madre por querer que duerma por las noches, tu cuerpo te lo pide, tu cerebro está cansado.

Nos quedan muchas cosas por pasar juntos, para las que ninguno de los dos estamos preparados, pero lucharemos juntos esta guerra, eres la mejor madre, que nadie te haga pensar lo contrario".

Para nuestras madres, para las que somos y serán madres.

Imagen de kelin en Pixabay